Fiestas de terruño

Nueve de octubre, fiesta del terruño. Cada trocito de España tiene su fiesta particular, bien sea de la comunidad o local. En un par de días le toca a al a Comunidad Valenciana.

Con tal motivo el Búho de Oro se engalanó de banderas cuatribarradas con franja azul, y fotos de Jaime I el Conquistador. Para mayor implicación en la fecha se servía Agua de Valencia gratis, un brebaje resultado de mezclar varios licores.

-Cuchaquillo, el 28 de febrero pondrás finito y manzanilla, ¿no?.

-Y el dos de mayo, aguardiente. ¡No te jode!.

-Hombre lo digo porque esta agua de Valensia se te sube la cabeza cosa mala. ¿por qué no me lo cambias por un gin-tonic?

-Vale, pero te lo cobro.

-¡Serás mamón!

-¡Che, aquí hoy se bebe agua de valensia o sumo de naranja, res de mariconaes, collons!

-¿Es usted valenciano, caballero?.

-¡Y a molta honra!

-Lo que yo no entiendo -el que terciaba en la conversación era D. Severo, el temible jefe de la policía local- es por qué se llaman valencianos si hay gente de Castellón y Alicante. Mire, en Andalucía, se sea de Jaén, Hueva o Cadiz, son andaluces, no sevillanos.

-Usted es que no lo entiende. Valensia es la regió y la capital. Allí todos somos valensiasn.

-Pues no sé yo -insistió D. Severo-, cómo se lo tomaran los de Castellón y los de Alicante...

-A ver, señor polisia. Valensianos, valensianos, valensianos, somos los de Valensia, que es donde están las fallas y la cosa esa de las Artes y las Siensias que nos han puesto desde la Generalitat. Los de Castelló y los de Alacant, bueno esos no tienen a Rita, son otra cosa.

-¿Y no se cabrean?. Preguntó Malaspulgas

-Che, che, che, que ca u es cau y todos sabemos donde estamos, ¿vale?

-Bien señores, en honor al día pongamos un poco de música fallera.

Con esto intenté zanjar una conversación con demasiada agua de Valencia.



-Che que collons, diu que musica fallera...

Y me pareció ver unas lagrimitas en los ojos del valenciano cuando Francisco enfiló el "Visca Valencia"