Lápiz Roto.

No creo en las casualidades. No creo que sea casual que en monover.com, su editor, haya colgado la biografía de Mariano José de Larra, Fígaro. Me muerdo las uñas de curiosidad por saber por qué lo ha hecho, con qué intención. Luis Andrés no da puntada sin hilo, pero en este caso me tiene desconcertado.

Dar pelos y señales del seudónimo es atemorizar a quien lo quiera utilizar. Nadie usa como propio el nombre de Eintein para hablar de ciencia, sería demasiado arrogante. Dudo mucho que en el foro de la página en cuestión utilice nadie el nombre de Fígaro. Muy pedante. Una cosa es usarlo como entretenimiento o como juego y otra insistir en él al tiempo que se publicitan sus méritos y cualidades, tan alejadas de cualquiera que escriba en la puntocom local.

Una versión más generosa sería la de la provocación o el alago. El sucedáneo de Fígaro no escribe nada desde hace semanas. La generosidad consistiría en pensar que da protagonismo a Fígaro para que, vía alago, vuelva a dejarse ver por el preguntón.

No sé cual será la intención última, sí sé que ha roto el lápiz de Fígaro, del sucedáneo.